La formación de especialistas en anestesiología, reanimación y control del dolor veterinario es cada vez más relevante en un contexto de procedimientos. En este escenario, el Programa de Formación de Especialista en Anestesiología, Reanimación y Control del Dolor Veterinario de la Universidad Andrés Bello (UNAB) responde a una brecha concreta del ejercicio profesional en Chile.
El programa surge desde una necesidad del sector clínico veterinario, donde la anestesiología y el manejo del dolor dejaron de ser áreas complementarias para convertirse en pilares de la atención.
“La creación de este programa responde a una necesidad real y creciente de la medicina veterinaria moderna: contar con profesionales altamente capacitados en anestesiología, reanimación y control del dolor, áreas que hoy son fundamentales para garantizar la seguridad del paciente, el bienestar animal y la calidad de la atención clínica”, explica Valentina Lepe, directora del programa.
Entre las principales competencias que adquieren las y los profesionales del programa destacan:
“Estas habilidades permiten reducir complicaciones anestésicas, optimizar el control del dolor, mejorar la recuperación postoperatoria y aumentar la seguridad del paciente en todas las etapas del proceso clínico”, señala Lepe.
“El sello distintivo de este programa es su enfoque integral, progresivo y profundamente clínico, el cual en la actualidad es el único en el área, ya que no existe ningún programa formativo a nivel nacional con estas características”, afirma la directora.
Este enfoque permite formar especialistas capaces de desempeñarse en distintos contextos clínicos, liderando procesos anestésicos complejos y aportando valor técnico a los equipos de salud animal.

El rol del anestesiólogo veterinario ha cambiado sustancialmente en los últimos años, ampliando su impacto dentro de la práctica clínica.
“Hoy ya no se limita a ‘dormir al paciente’, sino que cumple un rol protagónico en la seguridad anestésica, el manejo del dolor, la estabilización del paciente crítico y el trabajo interdisciplinario”, explica Lepe.
Contar con especialistas en esta área resulta clave para enfrentar procedimientos de mayor complejidad, mejorar los resultados clínicos y responder a estándares éticos cada vez más exigentes.
Pese a los avances, la directora reconoce que aún existen desafíos importantes en la medicina veterinaria nacional, como por ejemplo:
El Programa de Formación de Especialista en Anestesiología, Reanimación y Control del Dolor Veterinario de la UNAB busca incidir directamente en la reducción de estas brechas, formando especialistas con impacto clínico, académico y territorial.
El programa también tiene una clara orientación hacia la investigación aplicada y la innovación clínica, fomentando la generación de nuevo conocimiento en áreas como:
“Se espera que los residentes contribuyan activamente a publicaciones científicas y a la transferencia de resultados a la práctica clínica”, destaca la directora.
Asimismo, la especialización promueve la colaboración con disciplinas como cirugía, medicina interna, rehabilitación y docencia, fortaleciendo redes académicas y clínicas tanto a nivel nacional como internacional.