06 Febrero 2023

Continuidad Operacional: El Desafío para Empresas

La continuidad operacional es la capacidad de una organización para sostener sus funciones esenciales, incluso ante eventos que alteran su rutina. En un entorno marcado por eventos como ciberataques, fenómenos climáticos y amenazas sanitarias, el desafío ya no es evitar lo inesperado, sino desarrollar la capacidad para responder de manera ágil y sólida.

Antes reservada a grandes corporaciones, hoy la continuidad operacional preocupa a empresas de todos los tamaños, sobre todo a las que dependen de logística, manufactura o distribución. Para anticiparse, la gestión de operaciones establece políticas, protocolos y estructuras que preservan el flujo del negocio pese a cualquier turbulencia externa y refuerzan la resiliencia empresarial en mercados dinámicos.

¿Por qué la continuidad operacional es crítica para cualquier negocio?

Interrumpir el trabajo diario puede costar mucho más de lo que la mayoría imagina. No se requiere un terremoto para paralizar un sistema productivo — basta con una falla en los servidores, un proveedor que no llega a tiempo o un corte prolongado de energía. Entre los daños más habituales figuran:

  • Pérdida de productividad: sin los recursos mínimos, los equipos no producen y las metas se postergan indefinidamente.
  • Impacto financiero: en sectores de márgenes estrechos, una semana sin actividad puede devorar los resultados de todo un trimestre; solo en el agro chileno el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, evidenció que los eventos climáticos y desastres durante 2023 ocasionaron pérdidas cercanas a .
  • Clientes insatisfechos: retrasos, cancelaciones y promesas incumplidas erosionan la confianza que tanto cuesta construir.
  • Daño reputacional: una marca que no responde a tiempo, pierde credibilidad ante clientes, socios e inversores.
  • Riesgo de cierre: para muchas pymes, un solo golpe duro puede resultar definitivo.

Contar con un plan robusto reduce los periodos de inactividad y acota las pérdidas. Por ello, integrar la continuidad al marco estratégico de la gestión de operaciones se ha convertido en un requisito indispensable.

Los pilares de un buen plan de continuidad operativa

Un sistema eficaz se construye desde una visión transversal y dinámica que integra procesos, tecnología y personas. Descansa sobre cuatro pilares que se fortalecen mutuamente.

1. Evaluación de riesgos y vulnerabilidades

Cada industria enfrenta amenazas particulares — desde ciberataques hasta bloqueos de caminos—. Detectar y jerarquizar esos riesgos según su probabilidad e impacto es el primer eslabón para reaccionar con certeza. La tarea incluye elaborar un mapa de amenazas, realizar análisis de impacto al negocio (BIA) y definir umbrales de tolerancia que permitan activar los protocolos antes de que la situación se torne crítica.

2. Identificación de funciones críticas

No todas las áreas detentan el mismo peso. Un mapa que distinga procesos vitales de secundarios facilita asignar recursos y diseñar planes de respaldo coherentes. Aquí se definen objetivos de máximos de recuperación (RTO) y de puntos de recuperación de datos (RPO) para cada función, además de documentar dependencias entre unidades y proveedores clave.

3. Capacitación de equipos y simulacros

Las mejores políticas fracasan si el personal no sabe cómo aplicarlas. Talleres, ejercicios prácticos y simulaciones periódicas afinan la respuesta y exponen puntos ciegos antes de que aparezcan en la realidad. Invertir en cultura de continuidad implica entrenar roles específicos, fomentar la comunicación clara durante la crisis y rotar al personal en distintos escenarios para reforzar la resiliencia organizacional.

4. Actualización y mejora continua

El entorno cambia, los riesgos evolucionan. Revisar el plan, incorporar lecciones aprendidas y adaptarse con agilidad, mantiene la propuesta vigente y confiable. La retroalimentación proviene de auditorías internas, métricas de desempeño (como tiempo de recuperación real) y cambios regulatorios. Implementar ciclos de mejora —Planificar-Hacer-Verificar-Actuar— asegura que el sistema crezca al mismo ritmo que las necesidades del negocio.

Gestión logística: un eslabón decisivo para la continuidad operativa

Entender qué es continuidad operativa desde la gestión logística es crucial: si se detiene el flujo de insumos o datos, toda la cadena se frena. Contingencias como la escasez de materias primas, picos de demanda, congestión en hubs o ciberataques exigen anticipación, flexibilidad y tecnología para mantener la operación.

Cinco focos de resiliencia en la cadena de suministro

  1. Diversificación de fuentes y modalidades: trabajar con proveedores de distintos países y habilitar rutas y medios alternativos —terrestres, aéreos, marítimos y servicios integrados de última milla— reduce la exposición a eventos locales y evita que un único cuello de botella paralice la operación.
  2. Visibilidad de extremo a extremo y analítica predictiva: sensores IoT, WMS/TMS en la nube y gemelos digitales permiten rastrear inventario, pedidos y transporte en tiempo real; al combinar datos de demanda, tráfico, clima y capacidad instalada, es posible anticipar desviaciones y ajustar planes antes de que la contingencia se materialice.
  3. Inventarios de seguridad y capacidad flexible: mantener stock estratégico en productos críticos o habilitar “warehousing on-demand” con 3PL y dark stores protege contra quiebres sin elevar costos en exceso, equilibrando liquidez y resiliencia.
  4. Colaboración extendida con socios logísticos: compartir información con operadores, carriers, fulfillment centers y marketplaces crea un ecosistema sincronizado que reacciona con rapidez ante interrupciones; contratos flexibles y acuerdos de nivel de servicio contingente premian la respuesta ágil y el cumplimiento de metas.
  5. Gestión del retorno y sostenibilidad: implementar logística inversa (recolección, reparación, reciclaje) y optimizar rutas con algoritmos de carga completa disminuye costos a largo plazo, reduce la huella de carbono y refuerza la reputación corporativa.

Las organizaciones que cultivan una estructura madura en gestión logística sostienen su nivel de servicio, evitan quiebres de stock y protegen su reputación incluso cuando el entorno se vuelve adverso. Esta mirada integral transforma la vulnerabilidad en oportunidad y genera valor a lo largo de toda la cadena.

Magíster UNAB: profesionales capaces de liderar la gestión logística

Las compañías necesitan líderes que transformen la incertidumbre en ventaja competitiva. La Universidad Andrés Bello responde a esta demanda con el , un programa que combina teoría aplicada y casos reales para desarrollar competencias en planificación, modelamiento y liderazgo del cambio.

Los participantes adquieren herramientas para diseñar sistemas eficientes, resilientes y sostenibles. Quienes completan el magíster UNAB aplican estas habilidades en manufactura, retail, salud, transporte y servicios, potenciando la eficiencia y la continuidad en contextos muy diversos.

Aplicabilidad transversal en industrias clave

El dominio de técnicas avanzadas permite a los egresados del magíster en gestión de operaciones anticiparse a cuellos de botella, minimizar interrupciones y liderar equipos en entornos volátiles. Sectores como la logística de la producción alimentaria o los servicios críticos encuentran en este perfil profesional un aliado para proteger sus procesos.

Cursar un magíster en gestión de operaciones abre puertas a posiciones estratégicas donde se decide el rumbo de la empresa frente a escenarios impredecibles.

Una estrategia que no se puede improvisar

Gestionar un negocio resiliente exige preparación, equipos capacitados y decisiones sustentadas en datos. Comprender qué es continuidad operativa — y convertirla en cultura organizacional — marca la línea divisoria entre reaccionar a una crisis y superarla con rapidez. El fortalecimiento de la logística, junto con una planificación estructurada, permite responder con eficacia a los imprevistos y asegurar la sostenibilidad del negocio.

Para quienes aspiran a conducir estas transformaciones, el camino académico especializado representa una oportunidad tangible de aportar valor real a las organizaciones del futuro.

Explora el , postula hoy mismo y conviértete en el profesional que lidera la resiliencia y la eficiencia en tu organización.