El Curso de Manejo Integral de Heridas para TENS de la Universidad Andrés Bello (UNAB) entrega una actualización teórico-práctica alineada con las guías MINSAL y con la evidencia científica más reciente. Su directora, Cynthia Cortés, explica los desafíos actuales y el aporte de esta capacitación en el fortalecimiento del rol técnico dentro de los equipos de salud.
Para Cynthia Cortés, desarrollar competencias en el manejo de heridas es indispensable para cualquier TENS que realiza cuidados directos. “Los TENS son quienes están en contacto permanente con el paciente, por lo que tienen la posibilidad de detectar precozmente alteraciones en la piel y prevenir complicaciones”, señala.
El curso refuerza los fundamentos fisiológicos de la cicatrización y entrega herramientas para identificar riesgos, aplicar técnicas seguras de curación y colaborar en estrategias preventivas. Esto no solo optimiza recursos y disminuye la incidencia de lesiones por presión, sino que también contribuye a una atención integral, continua y humanizada.
La capacitación combina contenidos actualizados con experiencias prácticas guiadas. Los estudiantes abordan:
En la dimensión práctica, participan de talleres y laboratorios donde entrenan preparación del material estéril, apoyo en curaciones complejas y técnicas de manejo seguro.
“Esto permite que el TENS se integre mejor al equipo, facilitando la comunicación con enfermería, medicina y kinesiología para una atención coordinada y centrada en el paciente”, explica Cortés.
Según la directora, las brechas más comunes en la práctica clínica incluyen la detección tardía de riesgos, la falta de registro sistemático y dificultades para comunicar hallazgos relevantes al equipo de enfermería. El curso aborda estas brechas entregando herramientas para:
“El TENS cumple un rol fundamental en la vigilancia continua del paciente y en el apoyo directo durante curaciones avanzadas”, afirma Cortés. Esto permite actuar de forma proactiva, disminuir complicaciones y elevar la calidad global del cuidado.

Una de las principales fortalezas del curso es el fortalecimiento de la autonomía profesional. Al desarrollar competencias en observación clínica, análisis, registro y prevención, el TENS adquiere mayor capacidad para anticiparse a complicaciones cutáneas y contribuir activamente a la continuidad del cuidado.
“Comprender los fundamentos del marco TIME y del manejo avanzado de heridas permite que el TENS tome decisiones informadas y trabaje con mayor seguridad técnica y respaldo científico”, destaca la directora.
Esta formación potencia su rol dentro del equipo interdisciplinario, posicionándolo como un profesional clave en la seguridad del paciente, la gestión del riesgo y la atención basada en evidencia.
El Curso de Manejo Integral de Heridas para TENS de la UNAB ofrece una actualización integral que combina teoría, práctica y lineamientos vigentes. Su enfoque preventivo y su énfasis en la comunicación efectiva contribuyen a una atención más segura, oportuna y centrada en el paciente.
Para TENS que buscan fortalecer su rol, mejorar su criterio clínico y participar activamente en la prevención y tratamiento de heridas, este curso representa una oportunidad concreta de crecimiento y reconocimiento profesional dentro de los equipos de salud.