Los trastornos temporomandibulares (TTM) presentan una prevalencia cercana al 30% de la población, pero faltan especialistas. En este escenario, el Diplomado Clínico en Diagnóstico y Urgencia en Trastornos Temporomandibulares de la Universidad Andrés Bello (UNAB) se posiciona como un programa estratégico de educación continua, orientado a fortalecer competencias clínicas y a servir como punto inicial para la continuidad de estudios de postgrado.
El programa está orientado principalmente a cirujanos dentistas generales, especialmente aquellos que se desempeñan en atención primaria.
El diplomado permite que las y los profesionales puedan:
“La idea es que puedan tratar o manejar casos de urgencia, diagnosticar alteraciones articulares y musculares, y realizar una derivación oportuna según corresponda”, explica María Cecilia Pesce Ortega, directora del programa.
Uno de los principales atributos del Diplomado en Diagnóstico y Urgencia en TTM es su modalidad semipresencial, que facilita la participación de profesionales de distintas regiones.
“Tenemos estudiantes de Antofagasta, Temuco, Coquimbo y Punta Arenas. Las clases teóricas son online y sincrónicas, lo que permite conectarse desde cualquier lugar del país”, señala Pesce.
El Diplomado en Diagnóstico y Urgencia en Trastornos Temporomandibulares entrega una formación clínica integral y actualizada.
Al finalizar el programa, las y los estudiantes serán capaces de:
“Los estudiantes egresan con la capacidad de diagnosticar de manera específica los trastornos temporomandibulares y evaluar previamente tratamientos de ortodoncia o rehabilitación”, destaca la directora.
El Diplomado en Diagnóstico y Urgencia en Trastornos Temporomandibulares también cumple un rol clave como base para la continuidad académica.
“Es un diplomado muy útil para quienes están pensando en postular a postgrados en ortodoncia, rehabilitación, cirugía o trastornos temporomandibulares, ya que entrega puntaje para esas postulaciones”, afirma la directora.
Áreas a las que se puede proyectar la continuidad de estudios:
El diplomado se desarrolla en un entorno clínico de alto estándar, lo que constituye una ventaja comparativa.
Ventajas de estudiar en la UNAB:
“Contamos con infraestructura de primer nivel, equipos de imagenología, apoyo de radiólogos y un centro asistencial con especialistas que permiten derivar a los pacientes para continuar sus tratamientos”, concluye la directora.